(G140) Restaurante Baluarte (Soria)


Soria es la capital de provincia más pequeña de España, junto con Teruel, con apenas treinta y nueve mil habitantes. En su casco antiguo está El restaurante Baluarte, Caballeros, 14, bajos, un ejemplo de actualización de la cocina castellana sin perder la esencia de sus orígenes. A sus fogones está el joven cocinero Óscar García Marina, nacido en Vinuesa. Haciendo un esfuerzo de memoria creo que estuvimos en el restaurante Alvar González (Vinuesa) el año 2007 donde Óscar trabajó en sus inicios.

Ofrecen solamente dos Menús, el tradicional y otro más moderno y actualizado. Nos decidimos por este segundo que consta de siete platos y dos postres. Sorprende que predominen los platos de pescado y setas. Aunque la sequía, que se nota en los bajos niveles que lleva el Duero, no favorece la campaña micológica. La mesa estaba decorada con Astromelias blancas naturales, lo que es de agradecer.

Empezamos con una Emulsión de frutos de mar con berberechos, mejillones y viera (foto), rico y refrescante. Seguimos con un Tataki de atún rojo con pimientos asados (foto), muy bueno.




Calabacín relleno de hongos y langostinos con trufa de verano (foto), muy rico. Hongos con foie y champiñones (foto), bueno.




Pasamos a platos más consistentes. Huevo crujiente con garbanzos (foto), bueno y contundente. Trucha atemperada con miso y hierbas aromáticas (foto). Se trata de una trucha asalmonada que posee un delicado sabor. Para finalizar un plato de carne. Cilindro de Ciervo (foto), excelente.





Pasamos a los postres que ayudaron a bajar la suculenta comida. Granizado de pepino con sorbete de limón y jengibre (foto), bueno y refrescante. Financier con naranja y helado de tomillo (foto), correcto.




El pan de dos tipos: de pasas y nueces y de pueblo hecho con masa madre, excelente. Acompañado de aceite Artajo Coupage, una acertada mezcla de varios tipos a partir de las variedades Changlot Real, Picudo y Koroneiki. También muy acertados el café (foto) y los entretenimientos.



Para beber un agua mineral y una botella de Vallegarcía Viogner 2012 (foto). Se trata de un excelente monovarietal de la Tierra de Castilla en los Montes de Toledo. Brillante, amarillo, dorado, con reflejos verdosos. Intenso y aromático con notas florales muy sutiles. Elegante y untuoso en boca. Su paso por madera le da esa complejidad que lo hace diferente a cualquier otro vino. Que el restaurante estuviera cerca del hotel ayudó a ser generosos con la bebida. 



Baluarte es un muy buen restaurante que marca la senda por donde ha de ir la cocina castellana, en cuanto a ligereza y mesura, en la confección de sus platos. Lástima que la tranquilidad no nos acompañó al coincidir con la Feria Medieval de la ciudad. En cuanto a la excursión por los parajes del Río Lobos parecía la Rambla de Barcelona de lo transitado que estaba. Ya no quedan lugares tranquilos ni por descubrir en la naturaleza.

Precio 59 euros por persona + bebidas. Fecha de la visita el 12 de octubre de 2017.

PUNTUACIÓN: 7,5

Comentarios

  1. Hola!

    ¡¡¡Qué maravilla de platos!!! Se me hace la boca agua. Y hasta el pan lo has calificado de "excelente". Y siempre has dicho que el pan da calidad o la quita al restaurante (para ser de primera).

    Debistes disfrutar por las tierras de Machado. El entorno es una maravilla y la ciudad, encantadora.

    Un abrazo
    Adelaida

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