(G368) Restaurante Tampu (Madrid).

Restaurante Tampu (Madrid)

Con motivo de una escapada, casi improvisada, para ver la exposición del pintor Paolo Veronese en el Museo del Prado, nos acercamos a este buen restaurante peruano. Tampu, Calle de Prim, 13, 28004 Madrid. El restaurante nace como marca en 2011 en el barrio de Prosperidad en Madrid. Desde ese entonces el chef Miguel Valdiviezo nos muestra una perspectiva diferente de la rica cocina peruana.

Nos trajeron un maíz cancha y una mantequilla al Rocoto (foto) junto con pan para entretener la espera. Empezamos por unas tapas o bocados, como dicen ellos. Bombita de arroz con pato (foto), en una croqueta frita bañada en crema huancaína con sarza criolla. Muy rica.


Croqueta líquida de ají de gallina (foto). Uno de los bocados más emblemáticos. En su versión líquida, rellena del guiso más conocido de la cocina criolla, el ají de gallina. Suculenta. Seguimos con un Sanguchito “chino-criollo” (foto). Pan estilo chino hecho en casa, chicarrón acabado en wok con soja japonesa shoda y polvo chino de cinco sabores, crema de camote dulce y sarza criolla de hierbabuena. Estupendo bocadito.


Como segundo y ya más consistentes pedimos un Ceviche verde norteño (foto). Ceviche al natural de corvina, chipirón, mejillón, zamburiña y pulpo, sobre una leche de tigre al ají limo y cilantro, maíz cancha, zarandajas, crujiente de plátano macho y helado de aguacate. De picor medio resulto un plato muy interesante. Qala Phurka (foto). Presa ibérica marcada al punto, salsa de carapulcra (cerdo, ají panca, cacahuetes, vino, chocolate y canela), patata gallega confitada en aceite aromatizado con vainilla de Madagascar. Excelente combinación. Muy original, distinto a lo que puedes comer en un peruano clásico.


Llegamos a los postres bastante “llenitos” pero con sitio para, al menos, compartir uno. Tierra del Inca (foto). Helado y espuma de lúcuma, (que sabe a dulce de leche) tierra de chocolate, trufas de chocolate cuzqueño, crue de cacao y zumo de frambuesa. Rico y contundente.

Para beber agua mineral Numen, una cañita de cerveza y un par de Pisco Sour (foto) ideales para entonarse.

Se trata de una cocina peruana más innovadora que se atreve a mezclar sabores, alejándose un poco del gusto clásico peruano, más previsible. Un lugar ideal para una comida pausada. Precio a la carta 60 euros por persona bebidas incluidas. Fecha de la visita 27 de agosto de 2025.

PUNTUACIÓN: 7

Comentarios

Entradas populares de este blog

(L232) Anatomia de un instante (2009)

(L187) El jinete polaco (1991)

(L116) La Regenta (1884) – 4.- Estructura, personajes y modo narrativo.