(L33) Paradero desconocido (1938)


Kressman Taylor, Paradero desconocido (1938).

Kathrine Kressmann Taylor (1903-1996) es una novelista americana de una gran sensibilidad que logró captar la verdadera esencia del totalitarismo que sus contemporáneos se negaban a aceptar. El libro fue bien acogido pero después de la guerra cayó en el olvido hasta el momento en que se recuperó la memoria de los perseguidos, con la conmemoración en 1995 del cincuentenario de la liberación de los campos de exterminio nazi.

Paradero desconocido (1938) es la historia de dos amigos y socios alemanes, distribuidores de arte en San Francisco. Martín Schulse vuelve con su familia a una Alemania regocijada por los avances del país desde la humillación de la Gran Guerra. Max Eisenstein, el socio judío, permanece en los Estados Unidos haciéndose cargo del negocio. “Querido Martin: ¡De vuelta en Alemania! ¡Cómo te envidio! Aunque no la he visto desde que era un niño de escuela, escribir Unter den Linden (Bajo los tilos) todavía me conmueve…”

La técnica utilizada es una serie de cartas que se van cruzando los amigos, al estilo de 84, Charing Cross Road (1970) de Helene Hanff. Al principio las cartas circulan con normalidad pero poco a poco Martín escribe maravillas sobre el tercer reich y la figura de Adolf Hitler. Max duda del entusiasmo de su amigo, oyendo los testimonios presenciales que salían de Berlín, donde se perseguía a los judíos y sus negocios. Martín le responde que unos pocos deben sufrir para que millones sobrevivan, el asunto judío solamente es un pequeño incidente, algo más grande está sucediendo. Martin le pide que deje de escribir pues no está bien visto que se relacione con un judío, su posición y la de su familia podrían estar en peligro. Max le vuelve a escribir cuando su hermana Griselle, actriz de teatro, tiene una representación en Berlín y no sabe nada más sobre su situación, entonces le pide ayuda a Martín para que la proteja de los nazis, éste no lo hace y ella es asesinada. A partir de aquí las cartas de Max son más frecuentes, con pedidos de cuadros y medidas que los mismos que los nazis creen ser códigos secretos, hasta que Martin le ruega que no le escriba más porque le está comprometiendo. La última carta le es retornada a Max con el matasellos Adresse Unbekannt (paradero desconocido).

En un anexo final, el hijo de la señora Taylor, nos explica de donde le surgió a su madre la idea para escribir la novela. La obtuvo de un artículo minúsculo de las noticias, los estudiantes americanos en Alemania escribieron a casa explicando la verdad sobre las atrocidades nazis, una verdad que la mayoría de los americanos no aceptarían. Los jóvenes de vuelta a América pensaron que sería divertido enviarles cartas burlándose de Hitler, pero al recibirlas sus amigos alemanes les escribieron que no lo hicieran, que los ponían en peligro. Así surgió la idea de la carta como arma o asesinato por correo.

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