José Luis Sampedro (1917-2013)



Ayer murió una persona entrañable dentro del mundo de la cultura de este país, se trata de José Luis Sampedro (1917-2013) a los noventa y seis años a consecuencia de lo que todo el mundo debería morir, de una enfermedad llamada vejez. Fue economista, profesor y escritor, su dilatada vida le permitió dedicarse y destacar en todas estas actividades. 

Sampedro ejerció un humanismo crítico acerca de la decadencia moral y social de Occidente, del neoliberalismo y las brutalidades del "capitalismo salvaje" que olvidan a las personas y se centran en la producción y en el mercado1. “Pero la gente quiere ser propietaria, porque quiere mandar, y quien posee una cosa quiere otra. Hace falta menos para vivir bien. (…) El capitalismo lo convierte todo en mercancía. Somos naturaleza, y poner al dinero como bien supremo nos conduce a la catástrofe”2.

En una entrevista le explicó a la periodista Luz Sánchez-Mellado: “Nuestro tiempo es para mí, esencialmente, un tiempo de barbarie. Y no me refiero solo a violencia, sino a una civilización que ha degradado los valores que integraban su naturaleza. Un valor era la justicia. Dígame si Guantánamo o lo que pasa en China es justicia. (…) En 2000 años, la humanidad ha progresado técnicamente de forma fabulosa, pero nos seguimos matando con una codicia y una falta de solidaridad escandalosa. No hemos aprendido a vivir juntos y en paz”3.

Su pensamiento defiende la verdad por encima que las creencias que hacen al hombre un esclavo de las ideologías y las religiones. “Cuando creemos lo que no vemos, acabamos por no ver lo que tenemos delante”4.

“¿Y frente al miedo a la muerte? Frente al exterior que no podemos conocer del todo hay una actitud de inquietud e indefensión. Eso nos lleva a decir: voy a transformar el mundo, como dicen ahora. Yo no pretendo cambiarlo, sino estar en armonía con él, y eso supone una vida que cursa como un río. El río trisca montaña abajo, luego se remansa, y llega un punto, como estoy yo, en que acaba. Mi ambición es morir como un río, ya noto la sal. Piense en lo bonito de esa muerte. El río es agua dulce y ve que cambia. Pero lo acepta y muere feliz porque cuando se da cuenta ya es mar. Ese es un consuelo. No necesito la esperanza de un personaje que me acoja”5.

Su mujer nos relata sus últimos momentos “Nos dijo que quería beberse un Campari”, contó Olga de Lucas sobre los últimos momentos del escritor, “así que le hicimos un granizado de Campari. Me miró y me dijo: ‘Ahora empiezo a sentirme mejor. Muchas gracias a todos’. Se durmió y al cabo de un rato se murió”.

De su abundante producción os recomendamos El río que nos lleva (1961); La sonrisa etrusca (1985) y Economía humanista, algo más que cifras (2009).

NOTAS:

1. José Luis Sampedro, “Crisis económica y crisis de civilización”, El País, 28/10/1979.

2. Luz Sánchez-Mellado, “Entrevista a José Luis Sampedro” El País, 12/06/2011.

3. Ibídem.

4. Ibídem.

5. Ibídem.

Comentarios

  1. Un ejemplo de persona íntegra y lúcida. Mientras viva en nuestra memoria, no morirá. Por cierto, no olvides recomendar también "La vieja sirena".

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  2. Gracias V por tu comentario y tu recomendación.

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  3. Tomás m'ha agradat molt quan dius que José Luis Sampedro ha mort del que tothom hauria de morir... es admirable poder arribar a aquesta edat amb tanta lucidesa mental i amb unes idees i un compromís amb la societat actual com les seves.
    Jo destacaria la seva vessant literària i a part de "La sonrisa etrusca" destacaria "La vieja sirena" una història impactant que em va portar a visitar la ciutat de Palmira a Síria i "El amante lesbianso" el títol sol ja suggereix controvèrsia recordo un debat molt interessant que vam tenir una companya de feina i jo arrel d'aquest llibre.

    Maite Fàbregas

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  4. En una societat tan decadent com la que vivim, quan se'ns en va una persona de la qualitat humana, entre moltes altres, com el José Luis Sampedro, ens quedem més orfes. Estem més necessitats que mai d'humanistes com ell, del seu verb, de la seva saviesa.
    Recordo fa pocs anys, en una Diada de Sant Jordi a la Biblioteca Gabriel Ferrater de la UPC, s'intercanviaven llibres. Varem acordar anar-hi amb l'amiga Maite, portar uns llibres (fins a 5) i a canvi agafar-ne d'altres que ens poguessin interessar. Mai oblidaré que ella em va recomenar que agafès "La sonrisa etrusca" i així ho vaig fer. En bona hora li vaig fer cas, em va agradar moltíssim aquella novel·la intensa i alhora delicada que em va obrir el camí per llegir més lectures d'aquest autor, el següent va ser "El río que nos lleva", amb aquell estil que ja reconeixia del J.L.Sampedro, tambè a travès d'alguns dels molts articles que va publicar al llarg de la seva vida.
    Odile

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