(L205) Almas muertas (1842)
Nikolái Gógol, Almas muertas (1842)
El siglo XIX es
el siglo de oro de la literatura rusa. Lo que otros países hicieron en cuatrocientos
años, tal es el caso de Francia, Alemania o Inglaterra, Rusia lo hace en sólo
cien años, dando a luz a toda una pléyade de estupendos escritores.
Hoy hablaremos
de Nikolái Gógol (1809-1852) y de su obra
más importante Almas muertas (1842)
que todavía hoy al leerla posee una vigencia y una frescura admirables.
Argumento: El protagonista Pável Ivánovic
Chíchikov realiza una parada en una fonda rusa. Al día siguiente se dedica a
visitar a la autoridades de la ciudad de provincias N donde pretende asentarse.
Acude a la fiesta que da el gobernador, observa a los asistentes, diferencia a
los hombres en gordos y flacos, los define según sus características. Se pone a
jugar al whist. Se fija en los
terratenientes Manílov y Sobakévich. Asiste a todas las veladas a las que es
invitado y cae muy bien a los anfitriones. Chíchikov tiene dos siervos Selifán
y Petrushka quienes preparan el carruaje para que visite a los terratenientes
de la zona. Primeramente visita la hacienda de Manílov, conoce a su mujer y a
sus hijos pequeños. Después de la comida le propone a Manílov un negocio,
comprarle los campesinos (mujik)1
que se le han muerto pero que todavía constan en el censo como vivos. Chíchikov
es consejero colegiado, después se dirige a la aldea de Sobakévich. Selifán va
borracho y el carruaje vuelca, llueve abundantemente, se han perdido, piden
alojamiento en la primera casa que encuentran. La propietaria es una mujer,
Natashia Petrovna, viuda de Koróbochka, también a ella le ofrece comprarle sus
almas muertas, la vieja, incrédula, se resiste pero al final cede. Así visita a
Sobakévich, Nozdriov y el resto de propietarios de la zona.
Chíchikov
acompañado por Manílov se dirigen a la Cámara de Comercio para formalizar la
compra, en la sección de siervos, conoce al presidente Iván Grifórievich. Una
vez registrada la compra con los propietarios y los testigos se van a
celebrarlo. Los habitantes de N creen que Chíchikov es millonario. Las damas de
la ciudad empiezan a verlo con buenos ojos, a pesar de que es un poco gordo y
calvo, hasta recibe alguna carta de una admiradora. Se prepara para el baile
del gobernador donde es recibido efusivamente. Las damas no lo dejan respirar,
la gobernadora le presenta a su hija, una rubia beldad de dieciséis años de la
cual Chíchikov queda fascinado. Las otras damas no le perdona su falta de
atención y murmuran de él, para colmo llega Nozdriov diciendo que ha comprado
almas muertas, lleva encima más de cuatro copas pero el bulo corre aunque no lo
hayan creído del todo. Para agravar el tema, la viuda Koróbochka llega a la
ciudad para saber a cuanto se cotizan las almas muertas. Dos damas cotillas
creen que se propone raptar a la hija del gobernador. Los rumores corren por la
ciudad…
Comentario: el tema tratado
es un pretexto para hablar de los paisajes y costumbres de los habitantes de
Rusia. “¡Rusia, Rusia! Te veo desde mi maravillosa y espléndida lejanía. Te veo
pobre, dispersa, poco acogedora; no alegran ni asustan la mirada los osados prodigios
de la Naturaleza coronados por los osados prodigios del arte, las ciudades de
altos palacios con numerosas ventanas elevadas sobre enormes rocas cortadas a
pico, los pintorescos árboles y la yedra que se agarra a las paredes de las
casas entre el estruendo y el polvillo acuoso de las cascadas; no se vuelve
hacia atrás la cabeza para contemplar los bloques de piedra que se acumulan sin
fin hacia lo alto; no brillan a través de oscuros arcos, tendidos unos sobre
otros, en los que se enredan las parras, la yedra y millones de rosas
silvestres, no brillan a través de tales arcos, a lo lejos, las eternas líneas
de las resplandecientes montañas que se elevan hacia claros cielos de plata.”2
La novela es moderna
en un sentido estricto por sus personajes, por su trama, y por su narrativa.
Mientras se lee, se puede olvidar fácilmente que se escribió en 1842 cuando el romanticismo aún coleaba con fuerza en
Europa. Gógol concibió una obra que muestra lo censurable de la sociedad rusa
(y, por extensión, de casi cualquier sociedad) a través de una historia que se
desarrolla con agilidad. Tiene ciertos elementos de intriga cuya explicación demora
con maestría el autor.
Como nos dice
Vladimir Nabokov: “Moralmente Chíchikov apenas era culpable de ningún delito
particular por querer comprar hombres muertos en un país donde era legítimo
comprar y empeñar hombres vivos”.3
Destacar que Gógol
consigue retratar unos caracteres humanos formidables: desde el mismo
Chíchikov, noble en sus maneras, mezquino en sus pensamientos, pasando por el
cochero Selifán, borrachín y mentiroso, hasta Nozdriov, contumaz estafador y
juerguista. A diferencia de los personajes de Dostoievski, atormentados y
repletos de contradicciones, los personajes de Gógol son más bien caricaturas,
muestras humorísticas de arquetipos sociales seguramente existentes, pero
deformados por la pluma del escritor.
La novela
contiene varios pasajes sublimes, que por su extensión no podemos transcribir
aquí, como son: 1) La descripción del cofre de viaje de Chíchikov (Cap. III);
2) Sobakévich ensalza las cualidades de las almas muertas que le va a vender a
Chíchikov (Cap. V) y éste las recuerda más adelante como si los campesinos estuvieran
vivos (Cap. VII); 3) La descripción del jardín de Pliushkin (Cap. VI); 4) La
calma nocturna y la rapsodia de las botas (Cap. VII); 4) La noche en vela de
Chíchikov mientras la señora Koróbochka va a ver al arzobispo a comunicarle la
venta de las almas muertas (Cap. VIII).
Otras obras que también
recomendamos de Gógol son Taras Bulba
(1835); la comedia de teatro El inspector
(1836) y el cuento El abrigo (1842).
NOTAS:
1.- Los siervos
fueron liberados en Rusia por un edicto del Zar Alejandro II el 3 de marzo de
1861.
2.- Nikolai
Gogol, Almas muertas, Alianza
Editorial, Madrid, 2010, pp. 318-319.
3.- Vladimir
Nabokov, Curso de literatura Rusa,
Bruquera, Barcelona, 1984, p. 55.
Hola Tomás,
ResponderEliminarHe vist al teu blog que publicaras un comentari sobre Gogol, Almas muertas...... quina casualitat...... la meva parella també l'està llegint i moltes vegades em llegeix algunes pagines en veu alta......
Ja em llegiré amb cura el teu comentari.
ptns
Cristina