Entrevista a Ian McEwan en el CCCB de Barcelona. (09/03/2017)

Titulada El momento McEwan y moderada por Antonio Lozano, el escritor inglés Ian McEwan (Aldershot, 1948), sin dejar en todo momento de mostrar un fino sentido del humor muy británico, ha presentado su nueva novela titulada Cáscara de nuez (2016)¹. En ella el narrador es un feto. Lozano le pregunta cómo se le ocurrió el tema del feto. McEwan dice que estaba leyendo Hamlet y vió que el protagonista padecía una cierta impotencia para actuar y pensó que compartía esta característica con el feto.

Un feto solamente es una voz en la oscuridad y puedes confiar en él, siempre te dice la verdad y puede estar en muchos lugares ocultos. El feto está muy bien informado de lo que ocurre en el mundo porque su madre escucha la BBC. Le pregunta Lozano si no ha dudado de la novela y si no ha pensado en algún momento en dejarla aparcada. McEwan responde que “la duda está en la inspiración de todo artista”. Dice que “No abandona proyectos. Al igual que es leal con sus amigos” y además afirmá que se divirtió mucho al escribirla.

Según McEwan “Vivimos en una época post-post moderna y si no quieres leer una novela que narra un feto pues lo entiendo”. A la pregunta del moderador sobre su relación con los lectores, contesta que recibe cartas de sus lectores que le explican su experiencia con la lectura de sus obras y le preguntan cosas. Solamente ha recibido dos cartas amenazadoras.

La representación del flujo de conciencia es lo que ha hecho que la novela no muera. Pone los ejemplos de Jane Austen, James Joyce, Marcel Proust y Virginia Woolf. Es en la obra de Shakespeare cuando por primera vez que se representa a un ser humano moderno. McEwan afirma que con la edad dice que se ha vuelto más tolerante con las personas. Su nueva novela creció como una comedia, aunque en un principio no tenía esa intención.

No fue un joven rebelde o contestatario. En su casa no había libros ni música y para él esto fueron todo un descubrimiento. Sus amigos procedentes de familias más cultas y burguesas solamente querían emborracharse. Sobre la frase de Newton: “somos enanos que vamos montados en hombros de gigantes”, él dice que está de acuerdo con esta afirmación pero que a veces dice que los gigantes no le dejan ver el horizonte.

Es escéptico en cuanto a lo que puede hacer un escritor por el cambio climático. "Pueden hacer más los ingenieros y los científicos. Los políticos, eso sí, acaban estropeándolo todo.² Estamos a punto de encontrar una fuente de energía limpia más barata que extraer carbón. La energía eólica también se ha abaratado mucho". McEwan nos dice que la ciencia es un sistema fantástico. Los científicos son el único grupo que acepta que se equivoca. No es como en la religión que se cree en posesión de la verdad (menciona el Corán y la Biblia). “Hay una literatura científica maravillosa para personas no iniciadas. Al igual que no tenemos que ser Mozart para disfrutar de la música, no tenemos que ser científicos para disfrutar de esta literatura”.

El cine no puede dar la visión introspectiva que da la novela. Si no se hubiera engullido a la novela hace sesenta años. Hay algo en la literatura que el cine no puede recrear. Por tanto tiene algo superior al cine.

Lozano le pregunta sobre el Brexit. McEwan dice que la Unión Europea, con todos sus defectos, es uno de los proyectos más hermosos que ha iniciado la humanidad. La unión de los europeos después de una guerra atroz y un racismo. Nos dice que siente mucho el Brexit y que él no está a favor.

Explica que su generación tuvo más facilidades que la actual para encontrar trabajo, para poder dedicarse a escribir. Los alquileres eran baratos. La vida en general era más barata. Nunca se sintió pobre, tenía todo lo que necesitaba porque había muchas menos cosas, ni teléfonos inteligentes, ni ordenadores. 

Recomienda la narrativa breve. Es una buena idea para poder probar tus fuerzas. Si fracasas, no habrás empleado demasiado tiempo. Nos habla del escritor inglés del siglo XIX Anthony Trollope, hoy casi desconocido y aunque le gustaba a un político de derechas no dejaba de ser interesante.

Preguntas:

1.- ¿Qué le parece la adaptación de su novela Expiación (Atonement) al cine por Joe Wright el año 2007? 

Es una película bien hecha. La novela es difícil de comprimir. La elección de los actores es acertada, piensa en Keira Knightley. El guion, en el que no participe, fue bueno. Además posee una banda sonora estupenda. Me sentí contento con el resultado final.

2.- Le preguntan sobre su novela La ley del menor (The Children Act). 

La trama trata el caso de un niño testigo de Jehová que necesita una transfusión urgente y el juez que debe decidir entre su opción o la petición del hospital para realizarla. Es una historia que oyó explicar a un juez y que consideró fascinante. Actualmente está participando en la realización de la película.

3.- ¿El autor tiene responsabilidad moral/social o solamente estética? 

Los temas sociales son irresistibles pero no es obligatorio tratarlos en una sociedad democrática. Cree que la tecnología (la máquina de vapor empezó todo esto) nos sacará de este lio.

4.- ¿Cuál es su participación en las nuevas tecnologías? 

Contesta que tiene un grupo de whats app con su familia y que utiliza el correo electrónico. Está limitado a su generación. Todo está en Internet, lo mejor y lo peor.

5.- ¿Cuál es su opinión sobre el hecho de ser un autor famoso? 

Bueno, aunque no es una estrella del pop al que le desgarren la camisa y le quieran robar la chaqueta de piel, a veces se siente incómodo por el éxito y el hecho de ser conocido. Decir que no a muchas cosas para preservar su tiempo le hace sentirse un poco culpable.

Barcelona, 9 de marzo de 2017. Estuve gratamente acompañado por mis amigos y compañeros de trabajo: Miguel Ángel Santos, Maite Fàbregas y Leonor Barrachina.

NOTAS:

1.- Ian McEwan, Cáscara de nuez, Anagrama, Barcelona, 2017.

2.-  Comentar que Raúl Romeva y Vicenç Villatoro, actual director a dedo del CCCB, aparecieron en el acto. Solamente durante un minuto y luego desaparecieron. El tiempo justo de salir en la foto.