(L598) Me acuerdo (1978)
George Perec, Me acuerdo (1978)
Sigo comentado libros del
malogrado y gran escritor francés Georges
Perec (1936-1982). En esta ocasión hace una
reinterpretación, en versión francesa, del estupendo y original libro de Joe Brailland,
I Remember (1970). Aunque el
resultado para mi gusto no se acerca ni mucho menos a la brillantez de Brailland.
Argumento:
Me acuerdo de que antes de que cayese en mis manos un ejemplar de Je me souviens (1978), leí I rembember (1970) de Joe Brainard.
¿Qué une a dos nombres
separados por el océano, aunque unidos por una generación y por una muerte
prematura, provocada por las dos grandes enfermedades siglo XX, el sida y el
cáncer? Perec ensancha sus fronteras hasta países lejanos para construir la
biografía de un único individuo que, sin embargo, sigue siendo el epítome de
toda una generación. En sus páginas desfilan sesiones de cine, programas de
radio, funciones de teatro y clubes de jazz
que entretuvieron a millones de franceses.
El mapa físico de
Francia, con sus estaciones de metro y bulevares, convive con el político: por
las páginas de Me acuerdo se pasean
generales nacionales y extranjeros, escándalos políticos, guerras y
capitulaciones.
“Estos recuerdos se intercalan
en su mayoría entre mis 10 y mis 25 años, es decir, entre 1946 y 1961. Cuando
evoco recuerdos de antes de la guerra, para mí hacen referencia a una época que
pertenece al dominio del mito: lo que viene a explicar que un recuerdo pueda
ser «objetivamente» falso”.
Ejemplos:
14: Me acuerdo del pan
amarillo que hubo durante algún tiempo después de la guerra.
27: Me acuerdo de cuando
conseguí, en el Parque de los Príncipes, un autógrafo de Louison Bobet.
43: Me acuerdo del Adagio de Albinoni.
49: Me acuerdo de que,
gracias a Edith Piaf, debutaron los Compagnons de la Chanson: Eddie Constantine
e Yves Montand.
68: Me acuerdo de la
época en la que eran necesarios muchos meses, e incluso más de un año de
espera, para tener un coche nuevo.
86: Me acuerdo de que
Alain Delon era charcutero (¿o era ayudante de carnicero?) en Montrouge (Era
pescadero).
94: Me acuerdo de cuando
me dejaban castigado en el colegio.
102: Me acuerdo de Xavier
Cugat.
109: Me acuerdo de la
moda de las trencas.
115: Me acuerdo de la
tercera clase en los trenes.
123: Me acuerdo de que la
violinista Ginette Neveu murió en el mismo avión que Marcel Cerdan.
125: Me acuerdo de que
Kruschev golpeó la tribuna de la O.N.U. con su zapato.
136: Me acuerdo de cuando
volvíamos de vacaciones, el 1 de septiembre, y de que todavía quedaba por
delante un mes entero sin colegio.
160: Me acuerdo de que
los ciclistas tenían una cámara de repuesto enrollada en ocho alrededor de los
hombros.
161: Me acuerdo de que
Claudia Cardinale nació en la ciudad de Túnez (o en todo caso en ese país).
180: Me acuerdo de que
Burt Lancaster era acróbata.
185: Me acuerdo de los
agujeros de los billetes de metro.
197: Me acuerdo de la películas
del perro Rin-Tin-Tin, y también de ésas con Shirley Temple.
211: Me acuerdo de un
queso que se llamaba “La Vaca Seria” (“La Vaca que Ríe” los llevó a juicio y
ganó).
212: Me acuerdo de un
actor mexicano que se llamaba Cantinflas (creo que era él quien hacía de
Passepartout en La vuelta al mundo en
ochenta días).
224: Me acuerdo de que la
primera película en cinemascope se llamó La
túnica sagrada (y de que era pésima).
225: Me acuerdo de que
Boris Vian falleció a la salida de la proyección de una película basada en su
libro Escupiré sobre vuestra tumba.
255: Me acuerdo del
asesinato de Shaton Tate.
265: Me acuerdo de Lee
Harvey Oswald.
268: Me acuerdo de que,
durante su juicio, Eichmann estuvo encerrado en una jaula de cristal.
278: Me acuerdo de que la
palabra «robot» es de origen checo, y de que la inventó, creo, Karel Capek.
291: Me acuerdo de que la
primera película de Jerry Lewis y Dean Martin que vi se llamaba ¡Vaya par de marinos!
325: Me acuerdo del gran
apagón que sumió a Nueva York en la oscuridad durante varias horas.
376: Me acuerdo de Mister Maggoo.
400: Me acuerdo de cuando
estaba deseando que sonase la campana al final de clase.
443: Me acuerdo del hula-hop.
445: Me acuerdo de Sissi con Romy Schneider.
458: Me acuerdo de Gloria
Lasso, y de Tilda Thar, y de María Félix.
461: Me acuerdo de los
noticiarios en el cine.
474: Me acuerdo de Caroline querida (Caroline chérie) (del libro y de la película) (Este recuerdo lo
comparte con Annie Ernaux).
Comentario:
Si ya es difícil para los franceses situarse en estos recuerdos tan lejanos no
digamos para un lector del sur de los Pirineos. Y eso que he tomado como
ejemplos los recuerdos que más nos podrían sonar. Hay una multitud de
personajes de la vida cultural y política francesa que seguramente no nos
dirían nada.
Encuentro sus recuerdos
muy localistas. Quizá muchos de aquellos recuerdos están ya vacíos de
significado para el público joven francés y no digamos ya para el español.
Al principio, a esos
libros inclasificables se les llamó “artefactos literarios”, aunque con el
tiempo se han quedado meramente en libros, diría más: en libros esenciales del
siglo pasado, el de Brainard, y en curiosidad simplemente el de Perec.
También lo podemos tomar
como si fuera un divertido juego que podrías hacer con tus amigos y familiares.
Empezar diciendo Me acuerdo de... En el blog ya lo hicimos en el comentario del
libro de Joe Brainard.
BIBLIOGRAFÍA
Miguel Herráez, Me acuerdo ahora (parte 1),
Revista de Letras, 22/02/2021.
George Perec, Me acuerdo, Berenice, Córdoba, 2006.
Enrique Vila-Matas, Me acuerdo, El País, 21/02/2017.
Querido Tomás,
ResponderEliminarAquí otra reflexión que me quedaba pendiente a partir de tu comentario de "Me acuerdo", de Perec.
A ver qué tal me sale, pues las comidas en el Monasterio, pese a ser humildes, son abundantes y le dejan a una con ganas de pasar la digestión en posición horizontal.
Te agradezco que hubieras escogido referentes que no nos son lejanos para españolitos como nosotros que, quizás para la gran mayoría, todo el mundo francés de la "chanson" francesa a la "nouve vague" nos suena pero casi casi de oídas, en ningún caso vivencias en 1º persona.
No obstante, pese a mi insultante a la par que exultante juventud, puedo decir que de tu selección hay muchos ítems que puedo secundar, no tanto por recuerdo, más bien por aquello que llamamos "culturilla general":
¿Quién no conoce el adagio de Albinoni? ¿Quién no conoce las orquestas de Xavier Cugat, que siempre parecía más atento a la cámara que a la dirección de sus músicos?
Alain Delon, Burt Lancaster (El temible burlón, ¡acrobatísimo!) y Claudia Cardinale (te recomiendo el film costumbrista La Goulette, 1996, si no lo has visto ya) justo aparecieron tangencialmente no hace mucho en el blog, a raíz de El Gatopardo.
Edith Piaf y su amor, Marcel Cerdan... qué decir, qué trágico.
Cantinflas (efectivamente protagonizó junto a David Niven La vuelta al mundo...1956)
Shirley Temple: negaré siempre haberte confesado en este mail que mi hermana mayor me llama "la shirley" por mis rizitos de oro, jejejeje
Bien, tantos otros referentes, como la 3º clase de los trenes ("El sevillano" o "el catalán", depende desde donde se mire). Se podría decir que yo provengo de ahí, de ésa 3º clase de los trenes. Muchos de nosotros, ¿verdad?
En definitiva, podríamos reprender esos recuerdos de toda una generación y, ahora sí, escribir los nuestros propios.
Abrazo!
Alicia F.