(L711) El resplandor (1977)
Stephen King, El resplandor (1977)
Sigo trayéndoos las
mejores novelas de Stephen King (Portland,
1947), escritor americano de misterio, suspense y terror al que
me ha aficionado mi amiga Manoli Rodríguez del Club de Lectura de Olesa. ‒Lástima
que ella no esté abierta a otras lecturas que le propongo‒. Para mi The
Shining junto a Misery son sus dos obras maestras.
Argumento: Jack Torrance se presenta a una
entrevista de trabajo con Stuart Ullman,
el director del hotel Overlook. “Volvieron a la posición del principio, Ullman
detrás de la mesa del despacho y Jack frente a él, entrevistador y
entrevistado, solicitante y patrón reacio. Éste entrecruzó sus pulcras manos
sobre el papel secante y miró fijamente a Jack; Ullman era un hombre menudo y
calvo, con traje de banquero y discreta corbata gris. La flor que lucía en la
solapa contrastaba con una pequeña insignia, sobre la que se leía en pequeñas
letras doradas: PERSONAL.
‒Francamente, señor
Torrance, Albert Shockley es un hombre muy poderoso. Tiene grandes intereses en
el Overlook... que por primera vez en su historia ha dado beneficios en la última
temporada. El señor Shockley pertenece también al Consejo de Administración,
pero no es hombre de hostelería, y él sería el primero en admitirlo. Ahora
bien, en lo que respecta a este asunto del vigilante, ha expresado claramente
sus deseos: quiere que le contratemos a usted, y así lo haré. Pero de haber
tenido libertad de acción en esta cuestión, yo jamás le habría admitido”.
El administrador le
explica lo que le sucedió a la anterior familia que contrató para vigilar el
hotel. El hombre era alcohólico y mató a su mujer a sus dos hijas y luego se
suicidó. Ulllman cree que padeció lo que se denomina «fiebre del encierro». Le
advierte lo que puede representar la soledad y el inconveniente de estar
aislados si se presentara cualquier percance, una caída, la rotura de un
hueso...
Jack está casado con Wendy y tiene un hijo de cinco años
llamado Danny, al que apodan doc.
Jack daba clase en una escuela pero fue expulsado por pegar a un alumno. A
veces sufre ataques de ira que no puede controlar. La familia vive en un
sórdido edificio de apartamentos en la ciudad de Stovington.
Watson,
el jefe de mantenimiento del hotel le enseña a Jack el funcionamiento de las
calderas. Mientras Jack recuerda como cuando Danny tenía tres años, éste le
echo cerveza sobre la obra de teatro que estaba escribiendo y que era
manuscrita. Cómo lo cogió por el brazo con tal fuerza que se lo partió. “Ásperamente
se pasó la mano por los labios y siguió a Watson al cuarto de calderas. Era un
lugar húmedo, pero no era sólo la humedad lo que le cubrió de un sudor
enfermizo y pegajoso la frente, el vientre y las piernas, sino que fue el recuerdo,
ese azote cruel capaz de hacer que aquella noche de hacía dos años pareciera
algo ocurrido hacía dos horas. No había distancia en el tiempo. Volvieron la
vergüenza y la repulsión, la sensación de no valer nada, esa sensación que le
empujaba a tomar un trago, lo que era motivo de una desesperación aún más
sombría. ¿Habría una semana, un día, una simple hora de vigilia en que la
ansiedad de beber no lo atacara por sorpresa?”
La calefacción es vieja
le dice Watson. Tiene que vigilar que las tuberías del agua no se congelen.
Mientras le explica el funcionamiento de las instalaciones, Watson también le cuenta
la leyenda negra del hotel y todas las personas que han muerto en él.
Sabemos que Danny nació
con un manto sobre el rostro. Tiene algún tipo de poderes, ve visiones: “Danny
miró furtivamente a sus espaldas, hacia la ventana de la cocina. A veces,
cuando se esforzaba mucho en pensar, las cosas reales se alejaban y veía otras
que no estaban. En cierta ocasión, poco después de que le hubieran escayolado el
brazo, tuvo una de esas experiencias. En aquel momento sus padres no se
hablaban, pero pensaban, eso sí. Las ideas de DIVORCIO
se cernían sobre la mesa de la cocina como una nube negra llena de lluvia,
preñada, próxima a estallar. Él se sentía tan mal que no podía comer; la idea
de comer con toda esa nube negra de DIVORCIO
encima le producía náuseas. Y como todo le parecía tan desesperadamente
importante, Danny se había sumergido por completo en la concentración y había
sucedido algo. Cuando regresó al mundo de las cosas reales, estaba tendido en
el suelo, manchado de judías y puré de patatas, y su mamá lo tenía en brazos
llorando mientras papá llamaba por teléfono. Él se había asustado y había
tratado de explicarles que no pasaba nada, que eso era lo que le sucedía cuando
se concentraba para entender más de lo que normalmente podía. Intentó explicar
lo de Tony, a quien ellos llamaban su «compañero de juegos invisible»”.
El cocinero del hotel se
llama Dick Hallorann, es un fornido
hombre negro que como Danny tiene “capacidades especiales”. Ellos se comunican
telepáticamente. Él lo llama «esplendor». Le advierte que verá cosas en el
hotel pero le dice que éstas no le podrán hacer daño y que si tiene algún
problema serio que lo llame y él vendrá.
Comentario: con
una admirable maestría, las primeras ciento cincuenta páginas están destinadas a
advertir a la familia Torrance de los peligros del hotel: los sueños
premonitorios de Danny, las historias que les explica el gerente Ullman, el
jefe de mantenimiento Watson o el cocinero Hallorann. Pero a pesar de todas estas
advertencias deciden quedarse. ¡Peor para ellos y mejor para nosotros!
La acción está
ambientada, aproximadamente, en 1977, en la página 45 se habla de la dimisión
del presidente Nixon por el escándalo del Watergate.
Jack Torrance es un
hombre culto. Nos habla de los Diarios
(1660-1669) de Samuel Pepys, del poeta Willam Carlos Williams, de la escritora
de misterio Shirley Jackson. En la novela se juega la palabra redrum (murder), y con red murder, muerte roja, en referencia a
La máscara de la muerte roja (1842),
el cuento de Poe.
Asistimos al proceso en
el que poco a poco la locura se va apoderando de Jack. Si lo comparamos con la
película de Kubrick, donde Jack Nicholson ya nos parece loco desde las primeras
escenas y con ganas de matar a su familia, en la novela es un padre amoroso. En
el film no asistimos a ese proceso de transformación. En el libro sabemos
muchas más cosas sobre Jack: su difícil temperamento, los maltratos que sufrió
en su infancia, sus problemas con la bebida, el miedo a recaer y a no tener con
qué alimentar a su familia, que son explicados con mucho acierto por King.
En el film se nos
escamotea la parte humana de Jack, un personaje en el que King volcó muchas de
sus propias inseguridades y miedos, uno de los más autobiográficos de su
carrera, dado su alcoholismo y su adicción a las drogas, sin las cuales él
creía que no tendría talento para escribir. Podemos ver la lucha interna y un
amor por su hijo que la película obvió en aras de mostrar un monstruo más
terrorífico. Otro elemento que tiene mucho protagonismo en la novela, y no así en
la película, son los animales que están recortados en el seto. En ciertos
momentos cobran vida propia.
King sabe prepararnos
para grandes emociones. Lo importante es cómo hace para llegar al clímax, cómo
consigue que entremos sin prisas, con detalle y profundidad, en ese mundo
fantasmagórico que representa el hotel Overlook. Como dice King en su libro “el
mundo no nos odia pero tampoco nos ama. Pase lo que nos pase, debemos mantener
vivo el amor y seguir adelante”. Lo que no es poco.
BIBLIOGRAFÍA
Diego Cuevas, ‘El
resplandor’: cuarenta años en el hotel Overlook, Revista Jot
Down, Septiembre de 2023.
Stephen King, El resplandor, Debolsillo, Barcelona,
2003. 656 págs.
Stanley Kubrick, El
resplandor, Warner Bross, RU/USA, 1980. 146 minutos.
Mireia Mullor, ‘El
resplandor’: entendiendo la película 42 años después, Revista
Esquire, 26/07/2022.
Joaquín Torán, El
resplandor, Stephen King: Kubrick era un genio, Fabulantes,
23/05/2015.
Tomas, ser fiel significa no traicionar a tu autor favorito. Quizás algún día pase a ser no fiel.
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