(512) El diamante Luna (1868)

Wilkie Collins, El diamante Luna (1868)

Traducida en ediciones más recientes como La piedra lunar (The Moonstone), este relato es un clásico de la literatura de detectives. Su autor, Wilkie Collins (1824-1889), puede ser considerado como el padre de la novela policiaca inglesa.

Argumento: los Brahmanes de la India custodian a la diosa de las cuatro manos que en su frente lleva incrustado el diamante Luna que según la leyenda cambia de intensidad de acuerdo con las fases lunares.

En el siglo XVIII Aurangzeb, emperador de los mongoles, arrasó los templos de los adoradores de Brahma y se apoderó del diamante. “La historia impresionó a mi primo John Herncastle que declaró, jactanciosamente, que habíamos de ver la piedra en su dedo si el ejército inglés tomaba Seringapatam”.

“Después del asalto vi a mi primo en la armería del Palacio con una antorcha en una mano y una daga que goteaba sangre en la otra. Se había apoderado de una enorme gema”. El indio moribundo se incorporó y dijo en su lengua nativa: “¡El diamante Luna tomará venganza en ti y en los tuyos!”.

Gabriel Betteredge, que ha pasado por los oficios de mozo, guarda de la casa y ahora mayordomo, nos explica la historia. Presta sus servicios en casa de lady Verinder (de soltera Julia Herncastle), recientemente viuda, situada en Frizinghall. Esperan la visita del señorito Franklin Blake. Su padre fue testamentario del coronel Herncastle, hermano de Julia, y le ha encargado que traiga el diamante para el cumpleaños de su prima Raquel.

El coronel dejó unas disposiciones selladas y depositadas con el diamante que deberían ejecutarse si su muerte resultara violenta. A cambio de unos favores del coronel al padre de Franklin en unos pleitos por sus derechos a un ducado este se vio obligado a hacerse cargo de la custodia del diamante.

En la conversación que mantiene el mayordomo le explica a Franklin el intento frustrado del coronel de visitar dos años antes a su hermana Miss. Verinder y a su sobrina Raquel. Al marcharse dijo que sin duda recordaría el cumpleaños de su sobrina. Franklin por su parte le explica que ha adelantado su llegada unas horas porque en Londres se sentía vigilado por un individuo de rasgos hindúes. Esto le hace recordar al mayordomo que unas horas antes había echado del lugar a tres saltimbanquis “indios de color caoba, vestidos de blanco que llevaban unos tamboriles colgados del cuello”.

Después de la fiesta de cumpleaños de la señorita Raquel, a la que asisten unos veinte invitados, entre ellos Míster Murthwaite, un explorador de la India de reputación universal y Godfrey Ablewhite otro primo Raquel que al igual que Franklin pretende los favores de la bella joven, Franklin le hace entrega del valioso y misterioso diamante a su prima.

A la mañana siguiente la señorita Raquel despierta a todos los de la casa. El diamante que depositó en un escritorio indio, para más inri, la noche anterior ha desparecido. Ante la poca habilidad de Seegrave, el comisario local, para resolver el caso envían de Londres al agente Míster Cuff. Se trata de un policía que viene precedido por una gran fama...

Comentario: Collins es el creador de un nuevo género, la novela de crímenes, en que el interés estriba en la persecución y detención de los culpables. Su técnica consiste en combinar una atmosfera de terror y una ingeniosa trampa final. Es el precursor de los novelistas detectivescos. El agente Cuff es el antecesor de otros detectives como el famosísimo Sherlock Holmes, quien le debe mucho de su sorprendente observación y su original método deductivo.

La técnica narrativa parece algo vetusta pero es divertida. Por ejemplo: cuando el mayordomo, Gabriel Betteredge, da por finalizadas sus explicaciones de lo que ha ocurrido en la mansión de Mrs. Julia Herncastle, se despide del lector y nos deja en manos de otro personaje, pero al mismo tiempo nos advierte que no creamos las cosas desfavorables que ese otro narrador diga sobre él.

En el siglo XIX Inglaterra, gracias a sus colonias, ha creado un imperio que domina el mundo. O dicho de otro modo: el mundo trabaja para Inglaterra. Las clases altas poseen abundantes propiedades, medios suficientes para llevar una vida regalada y criados para satisfacer todas las necesidades. La relaciones entre las diferentes clases son muy procedimentales y de un protocolo rígido y muy estricto. La compostura en las clases altas no se puede perder bajo ningún concepto.

A pesar de este encorsetamiento la novela no deja de ser distraída y logra que los amantes del género logremos pasar un buen rato, sin otras pretensiones más elevadas.

BIBLIOGRAFÍA

Wilkie Collins, El diamante Luna, J. Pérez del Hoyo editor, Madrid, 1969. (Versión resumida).

____________ La piedra lunar, Editorial Navona, Barcelona, 2016.

Juan Carlos Galindo, ‘La piedra lunar’, novela fundacional del género negro, genial y copiada hasta la saciedad, El País, 05/01/2017.

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