La belleza de las pequeñas cosas
LA BELLEZA DE LAS PEQUEÑAS COSAS
Cuando algo nos sobrecoge y emociona agradablemente, sentimos que estamos en armonía con nuestro espíritu. Todos tenemos conocimiento de la belleza en toda la amplitud del término, pero no debemos olvidar la belleza de las pequeñas cosas: caminar junto al ser amado; una madre observando a su bebé; la sincera sonrisa de un compañero en el trabajo; la melodía de una canción; el placer de leer un buen libro; una puesta de sol. Todo ello nos puede llevar a un estado de embriaguez sin necesidad de alucinógenos. Valoremos esos momentos mágicos, inaprensibles excepto para nuestra memoria. En estos tiempos donde los acontecimientos se suceden y transcurren de forma acelerada, efímera, es necesario detenernos un momento y apreciar las pequeñas cosas de la vida, con una mirada serena y con todos nuestros sentidos en estado de alerta.
Como muestra de lo anteriormente expuesto, me he permitido complementar este escrito con un tema musical de Bill Douglas Heaven in a wild flower (El cielo en una flor silvestre), basado en un poema de William Blake (1757-1827) que traducido al castellano dice así: "Para ver un mundo en un grano de arena y el cielo en una flor silvestre, abarca el infinito en la palma de tu mano y la eternidad en una hora. Quien se ata a una alegría destruye la vida alada; quien besa esa alegría cuando pasa volando vive el amanecer de la eternidad".
Pese a los contratiempos que vayan surgiendo a lo largo de nuestra vida, no dejemos nunca de perseguir la belleza.
AURELI HIDALGO
La bellesa de les petites coses, allí rau la serenor i els breus moments de felicitat. Ser-ne conscients i saber mirar al nostre voltant, trobarem aquesta pau que ens fa sentir bé. Gràcies al teu amic Aureli, les seves paraules sempre són vigents i les persones necessitem de tant en tant que se'ns recordi de nou per no deixar de tocar de peus a terra.Gràcies, Odile
ResponderEliminarHaig de dir que m'arribat a la profunditat del meu cor. xus
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